El crecimiento del trigo es muy variable en los departamentos más productivos del país. Por un lado, el clima fresco y la falta de lluvias benefician al cultivo en Alto Paraná, pero se necesita de humedad para realizar las desecaciones previas a la siembra de soja que iniciará en la primera semana de setiembre. Por otro lado hubo heladas hace días atrás en el departamento de Itapúa que afectaron en un 5% las parcelas en las zonas bajas, según el informe de la Unión de Gremios de la Producción (UGP).
El trigo tardío se beneficia bastante de este clima seco y frío. De igual forma, se necesita de humedad también para la siembra de soja, que inicia ya en unos pocos días, manifestó Aurio Frighetto, productor y dirigente de la Coordinadora Agrícola del Paraguay (CAP).
El departamento de Itapúa tuvo su tercera helada del año días atrás y a pesar de ser leve, afectó a los cultivos de zonas bajas en Colonias Unidas. La primera helada que se tuvo en julio fue la más fuerte porque arrasó con los plantíos que 16 de agosto del 2019 estaban en floración; la segunda dejó escarchas y la tercera fue leve pero afectó las parcelas que se ubican en zonas bajas, indicó Orlando Gallas, también dirigente de la CAP.
ESTADÍSTICAS
El trigo tuvo una importante recuperación en el 2018 y el volumen de producción prácticamente se duplicó en comparación al año anterior, de acuerdo a los datos de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco).
La campaña 2018 cerró con un nivel de cosecha de 1.358.000 toneladas, que representa un crecimiento del 94% en comparación con las 700.000 toneladas cosechadas en el 2017. La producción fue mayor por una gran mejora de los rendimientos promedios obtenidos por hectárea y también por una mayor siembra. En el 2018 sembraron 485.000 hectáreas, superficie que corresponde a un incremento del 13% en relación al año anterior.
REALIZAN SIMULACRO DE INFLUENZA
El Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) inició el Simulacro de Emergencia Sanitaria por Influenza aviar de Alta Patogenicidad, con la coordinación y apoyo internacional de Panaftosa - OPS/OMS y APHIS (Servicio Veterinario Oficial de EEUU). Este trabajo, que se desarrolla entre el 18 al 24 de agosto, es con el fin de evaluar la respuesta del servicio ante un eventual foco de influenza aviar y el legado de capacitaciones instaladas.
La influenza aviar es una enfermedad viral con alta mortalidad y morbilidad en la especie aviar, además es una zoonosis que potencialmente puede transmitirse al humano, comunicó el servicio veterinario oficial.
En la oportunidad, veterinarios de Paraguay, Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay tendrán la oportunidad de discutir, atender y responder mediante una simulación de campo a un posible brote de influenza aviar en el Paraguay.
El simulacro tiene lugar en el centro recreacional Marianela, a 61 km de Asunción, departamento de Cordillera, distrito de Atyrá.
Fuente: La Nación.